La BANANA, o también conocida como plátano, guineo, banano o plátano maduro; es una de las frutas más utilizadas para reponer energía. Sirve para mejorar el rendimiento físico, es ideal para deportistas ya que combate fatiga, cansancio y previene calambres. Es muy recomendada para niños y estudiantes ya que mejora la concentración y la memoria.
La BANANA es rica en FIBRA (en forma de prebiótico) que ayuda en la digestión, mejora el estreñimiento, fortalece el sistema inmune y fortalece la flora intestinal. Recuerda que mantener una buena salud intestinal ayuda a prevenir afecciones inflamatorias como la artritis, ASMA, eczemas entre otras.
Su alto contenido en POTASIO es indispensable en la eliminación de líquidos y sodio lo cual mejora la circulación sanguínea, la tensión arterial y enfermedades reumáticas. La BANANA también es rica en VITAMINA C, nutriente indispensable para transportar correctamente el oxígeno en el cuerpo y también mejora la absorción del hierro.
Es una de las frutas con más cantidad en magnesio lo cual es una de las frutas con mayor efecto anti- estrés, uno de los mejores relajantes naturales que tenemos a la mano. También se ha demostrado que el consumo de bananas maduras ayudan a mejorar síntomas de gastritis ulceras y acidez.
LA BANANA ayuda a calmar ansiedad por comer o calmar antojos.
Recuerda que la BANANA es rica en carbohidratos (azúcares) por tanto las personas con diabetes o propensas a padecerla, deben consumir la BANANA con moderación y preferiblemente no muy madura.
Cuanto más madura es la fruta, mayor su concentración de azúcares.
LA BANANA también es muy usada en la cosmética para hacer mascarillas, nutre la piel y la renueva.
¿Sabías que la parte interna de la piel de la BANANA sirve para eliminar manchas y verrugas de la piel?
LA BANANA aporta textura (cremosa) a las recetas, ideal para batidos, tortas, postres, panes, galletas. Y además sirve para reemplazar el huevo.
Espero te sea útil esta información 😉
Por aquí te dejo algunas recetas con BANANA.
Feliz fin de semana!